La justicia en su lugar. Experiencias de participación desde las escuelas en el juicio

La justicia en su lugar fue un espacio de encuentro que las Áreas de Educación de los Sitios de Memoria de Córdoba llevaron adelante junto a docentes y estudiantes, para difundir y apropiarse del juicio conocido como la mega causa "La Perla - Campo de la Ribera - D2". Esta actividad se proponía reflexionar sobre la importancia de los juicios por crímenes de lesa humanidad para la construcción de la democracia y difundir que "los juicios son de todos”, cualquier persona  puede asistir a las audiencias con sólo presentar el DNI. 

Los últimos miércoles de cada mes se invitó a cursos de escuelas primarias y secundarias, de escuelas públicas como privadas, a grupos y colectivos de organizaciones a los talleres en la explanada de Tribunales Federales I. Siempre hubo al menos dos escuelas, una a la mañana y otra a la tarde, y a veces varias en cada turno.

En los talleres se trabajó desde la producción artística sobre las historias de vidas de las víctimas de la causa y sobre el sentido de la justicia, con disparadores como lecturas de poemas, armado de flores rojas con las identidades de las víctimas, entre otros recursos. Al finalizar cada encuentro las producciones artísticas realizadas quedaban Tribunales para dejar una marca de ese taller en el espacio público.

En algunas ocasiones las propuestas surgieron de los mismos grupos que participaron, como un curso del colegio San José que llevó una obra de teatro que representaron en la vereda de Tribunales. Otra experiencia interesante surgió cuando por haberse suspendido la audiencia de la mega causa, funcionarios de justicia invitaron a pasar a la sala de audiencias y se pudo ver cómo era: donde se sientan los jueces, los defensores, las querellas, los acusados, los testigos, donde está el público. 

Muchos de los chicos y chicas que participaron en los talleres, también asistieron el día de la sentencia de la mega causa, el pasado 25 de agosto. A partir de los talleres como disparadores y del trabajo de numerosos docentes junto con la circular del Ministerio de Educación de la provincia que habilitaba el cambio de actividad para poder concurrir ese día a tribunales, el juicio se convirtió en un hito importante en la agenda educativa de las escuelas en Córdoba. Ese día cientos de estudiantes y docentes estuvieron presentes en lo que fue una jornada histórica.

"Hacer notar que podemos participar de ese espacio porque tenemos derecho"

Desde los espacios de memoria un eje importante de trabajo fue incorporar en los recorridos educativos los procesos de justicia por crímenes de lesa humanidad. Por eso durante cada uno de los juicios que se realizaron en Córdoba  se invitó a participar con la consigna "El juicio es de todos". Una de las preguntas más frecuentes de los estudiantes durante los recorridos educativos en los sitios era por qué si podían votar a partir de los 16 años, no podían ir a una audiencia de los juicios por lesa humanidad, ya que para poder asistir se requería ser mayor de 18 años.

Por eso otro de los objetivos de los encuentros de "La Justicia en su lugar" fue acompañar un reclamo que surgió del espacio de formación en Educación Popular y Derechos Humanos “¿Vivimos en el País del Nunca Más?" junto a los organismos de derechos humanos y otras organizaciones, para pedirle al tribunal que permita el ingreso a las audiencias de chicos y chicas a partir de los de 16 años. Para viabilizar este reclamo se hizo entonces una nota que firmaron muchos estudiantes, profesores y organizaciones. 

Finalmente, mediante una resolución de la Cámara Federal de Casación Penal, se habilitó a los adolescentes a partir de esa edad a asistir a las audiencias de juicios por crímenes de lesa humanidad.
El hecho de que este reclamo tuviera una resolución positiva también fue significativo porque  permitió evidenciar que tiene sentido movilizarse y luchar por algo. Permitió ver que vale la pena y que sí se pueden cambiar algunas cosas si se lucha por ello.